Moluscos

Propiedades nutritivas

Su valor energético es más bien bajo, dado que contienen poca cantidad de grasa: de 0,5 al 2% en los moluscos y de 2 al 5% en los crustáceos. En concreto, aportan en torno a 80 calorías por cada 100 gramos. No obstante, cuando se habla del valor energético de un alimento hay que tener en cuenta, entre otros aspectos, su forma de elaboración. Unos mejillones al vapor nada tienen que ver con los fritos de mejillón o tigres o los mejillones en salsa verde untada con pan.

La sabiduría popular los vincula a grandes cantidades de colesterol, y, en efecto, es así, pero con matices porque dentro de los mariscos existen diferencias. Los moluscos de concha concentran una cantidad similar de colesterol que los pescados.

Su contenido de hidratos de carbono no es relevante. En la mayoría de especies no supera el 1% y sólo se encuentra en cantidades superiores en moluscos de concha como ostras y mejillones, que contienen 4,7 y 1,9 gramos por 100 gramos de alimento.

Algunos de los minerales más destacables son el hierro, el potasio, el fósforo, el zinc y el yodo.

El potasio, que se encuentra sobre todo en las almejas, la vieira y el calamar, es un mineral necesario para el sistema nervioso y la actividad muscular e interviene en el equilibrio de agua dentro y fuera de la célula. El fósforo, abundante en todos los moluscos está presente en los huesos y dientes. También interviene en el sistema nervioso y en la actividad muscular, y participa en procesos de obtención de energía.

El zinc presente en grandes cantidades, sobre todo en la ostra, participa en el metabolismo de los macronutrientes (hidratos de carbono, proteínas y grasas), en el desarrollo de los órganos sexuales y en el funcionamiento del gusto y el olfato. El yodo es indispensable para el buen funcionamiento del tiroides, así como para el crecimiento del feto y el desarrollo de su cerebro.

En cuanto al hierro, el contenido medio por 100 gramos de los mariscos es inferior al de la carne, excepto en almejas, (24 miligramos), ostras (6 miligramos) y mejillones (4,5 miligramos). Sin embargo, hay que tener en cuenta que la ración habitual de consumo de estos alimentos suele ser pequeña. Por lo general, se toman como aperitivo o como ingrediente de otros platos y su consumo es esporádico.

Relativo a las vitaminas, sobresalen las hidrosolubles del grupo B (B3 y B12) y, en menor proporción, las liposolubles A y E. En general, las vitaminas hidrosolubles permiten el aprovechamiento de los nutrientes energéticos (hidratos de carbono, grasas y proteínas) e intervienen en numerosos procesos como la formación de hormonas sexuales, la síntesis de material genético y el funcionamiento del sistema nervioso.

La vitamina A contribuye al mantenimiento, crecimiento y reparación de las mucosas, piel y otros tejidos del cuerpo. Además, favorece la resistencia frente a las infecciones y es necesaria para el desarrollo del sistema nervioso y para la visión nocturna. También interviene en el crecimiento óseo, en la producción de enzimas en el hígado y de hormonas sexuales y suprarrenales. Entre las funciones de la vitamina E destaca su acción antioxidante, es decir, constituye un factor protector frente a ciertas enfermedades degenerativas, enfermedades cardiovasculares y cáncer.
 

Composición por 100 gramos de porción comestible - Datos 2019 / BEDCA
  Almeja Mejillón Ostra Vieira Calamar Pulpo
Calorias 48 61 64 86 72 91
Proteínas(g) 10,7 10,8 8,14 19 14 17,9
Grasas 1,61 1,9 2,21 0,9 1,47 1,4
G. saturadas(g) 0,34 0,41 0,37 0,23 0,46 0,3
G. monoinsaturadas(g) 0,24 0,35 0,31 0,09 0,18 0,2
G. poliinsaturadas(g) 0,59 0,52 0,87 0,23 0,66 0,5
Hierro(mg) 24 4,5 6 2,4 3,9 1,2
Magnesio(mg) 51 23 43 38 31,66 28
Potasio(mg) 314 92 240 480 316,33 230
Fósforo(mg) 130 236 187,5 315 158,5 170
Cinc(mg) 1,3 1,8 59,2 1,3 2,1 1,7
Yodo(mg) 160 35 20 58 - 64
B1 o Tiamina(mg) 0,04 0,1 0,14 0,04 0,06 0,07
B2 o riboflavina(mg) 0,14 0,14 0,19 0,1 0,16 0,04
B3 o niacina(mg) 4,1 3 1,85 6,4 2,8 6,8
B12 o cianocobalamina(mcg) Traza 8 16,75 1,8 2,15 3

mcg=microgramos